Juan José Iturriberry

Desde muy pequeño nació mi vocación musical. Toda la música me invadía de indescriptible entusiasmo. Mis padres me llevaban por aquel entonces a las audiciones al aire libre de la Banda Municipal en el Pabellón de la Música en el Parque Rodó, invariablemente dirigidas por el maestro Vicente Ascone, Mis estudios comenzaron con el tonete y siguieron con el piano. Los primeros, en Escuela Infantil de Iniciación Musical, bajo la dirección de Rubén Carámbula. Los de piano, bajo los cuidados de algunas profesoras particulares del instrumento, y fundamentalmente con Numen Vilariño quien me abrió mucho la cabeza para la música en general. Luego llegaron las ganas de componer y tras someterme a las pruebas reglamentarias de ingreso, inicié los estudios en el entonces Conservatorio Nacional de Música. Los comienzos fueron bajo las directivas de Carlos Estrada, Manuel Fernández Espiro, Antonio Mastrogiovanni y Héctor Tosar. Luego en forma particular, con Angelo Turriziani.

Realicé dos trabajos sinfónicos y en música de cámara, compuse alrededor cincuenta obras, destinadas a diversidad de conjuntos y solistas, algunas de ellas repuestas, en su casi totalidad, por el Núcleo Música Nueva.

Respecto a los compositores por los que siento mayor afinidad y han influido en mi producción, son: Debussy, Ravel y Morton Feldman, por citar una selección en extremo restringida.

En 1975, mi obra “Meditación” para oboe solo fue seleccionada por el jurado del Festival de la Sociedad Internacional de Música Contemporánea y estrenada por Nora Post en Boston, Estados Unidos.

Entre el 12 y el 21 de octubre de 1989, tuve participación en el “Tercer Encuentro Latinoamericano de Música Contemporánea” realizado en Santiago de Chile. En este evento, la obra “Fuera de la jaula” que compuse para piano preparado, fue seleccionada por el jurado del Encuentro e interpretada por la pianista Déborah Singer.

En síntesis, lo dicho anteriormente debe tomarse como una breve presentación.

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